via Instagram http://ift.tt/2Ackc9G
domingo, 26 de noviembre de 2017
#Repost @cocinalarense (@get_repost) ・・・ Historia de una cuchara perdida: ¿Qué se iba a imaginar esa fiel cuchara, por tantos años asidua de la mesa familiar, que iría a padecer obligada hibernación por un instante de descuido? No sería sino después de mucho lamentarnos por su aparente pérdida y echarla en falta cada vez que la requeríamos, cuando por fin apareció al tratar de descongelar el potaje de frijoles bayos que terminó por ser su gélida (y afortunadamente temporal) sepultura. Demás está decir que celebramos su vuelta a la vida, otra vez entre los cálidos efluvios de fogones, mesas y cocinas, adonde siempre perteneció. El juego de cubiertos, su familia, pues, se ha completado. Hija pródiga y rediviva, hemos jurado no perderla más de vista. Después de transformar los frijolitos de marras en suculento palo a pique con tropezones de pulpa de cochino marinada, mientras disfrutábamos del merecido postre, no pudimos dejar de reconocer que, incluso ahogada, disfrutó de excelente compañía. ¡Enhorabuena bienvenida!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario