Ver, Comer y Saber: “comer pan barato puede costarnos muy caro”. Para que sepas cómo puede afectar a tu salud , aquí tienes una radiografía pormenorizada del pan rápido: - Este tipo de pan está hecho de forma exprés a partir de uso elevado de levadura . Mientras un pan artesanal necesita 48 horas para elaborarse, fermentar y hornearse, este tipo de panes pueden estar listos en poco más de dos horas. ¿La consecuencia? Este pan fermenta en tu estómago, resultando altamente indigesto. - Están hechos, principalmente, con harinas que se le añaden mejorantes, levaduras químicas y muchas veces azúcares y grasas en exceso. El pan artesanal se hace solamente con harina, agua, masa madre (un fermento hecho a partir de harina y agua altamente digestivo y nutritivo) y sal. - El pan rápido aporta muchos azúcares e hidratos de carbono y apenas tiene probioticos. - Este tipo de pan aporta muy pocos nutrientes y timpaniza. Cae pesado, da acidez. - Tiene un alto contenido en gluten, lo que hace dificulta la digestión y puede dar lugar a intolerancias y alergias alimentarias, algo que con el pan artesanal no existe. - El consumo de este tipo de pan industrial se asocia también con cefaleas, inflamación intestinal, distensión abdominal y enfermedades digestivas. ¿Cómo distinguir un pan industrial de uno artesanal? - Estos panes se desmigajan mucho al cortarse, no tienen consistencia, mientras el pan artesanal tiene una masa densa, consistente y crujiente. - No huelen a pan ni saben prácticamente a nada, mientras el pan artesanal “huele que alimenta”. - Su miga es excesivamente blanca ya que están hechos con harinas altamente refinadas o con aditivos. - Las barras o panes son todos exactamente iguales, no tiene ninguna forma irregular, lo que indicaría un formado industrial. - Dura muy poco, se pone muy duro o blando como un chicle. Un pan artesanal puede aguantar varios días. - Es escandalosamente barato. Un pan rápido te costará menos que el artesanal.