via Instagram http://ift.tt/2xnXgW8
domingo, 24 de septiembre de 2017
#Repost @cocinalarense (@get_repost) ・・・ Visitar San Felipe y detenerse en el café-panadería de Pocho Suárez ya va siendo parte de un mismo ritual. O en otras palabras, no está completa una visita a la capital yaracuyana sin probar algunas de las excelencias que éste maestro panadero logra extraer de su horno. Verlo trabajar, apreciando su destreza y precisión de movimientos; fruto, desde luego, de su larga cohabitación con la artesanía del pan, fue todo un privilegio que no puedo dejar de agradecerle. En menos de dos horas, para mi asombro, hizo con su ayudante, no menos de 10 variedades de pan, entre las cuales recuerdo cachitos de chocolate, trenzas dulces, pan francés, quesadillas con ricota y queso de cabra madurado, panes de jamón, golfeados, concha dura y hasta ¡una pizza!, todos de masa madre, algunos con tiempos de fermentación de hasta 30 horas. Es decir, paciencia, tradición y sabiduría juntas. Por lo demás, como miembro activo de la Ruta Gastronómica Yaracuyana, Pocho se ha preocupado por hacerse de proveedores de materias primas locales de extraordinaria calidad como los mencionados ricota y queso de cabra madurado y el café, los cuales enriquecen y otorgan una singular personalidad a su propuesta. En fin razones de sobra para volver, una y otra vez, a contagiarse en Bistró Bakery con su estimulante alegría y pasión por la panadería artesanal.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario